El espacio de Claudia.

Otro articulo de Claudia que nos hará mirar dentro de nosotros.
Crítica a una sociedad carente de valores
La sociedad actual llena las consultas de los psiquiatras. Estamos perdidos sin saber en qué. Desorientados en lo fundamental. Nos faltan los referentes claros, coherentes, firmes, que empujen nuestras existencias con fuerza hacia delante, en la firme lucha de vencer los obstáculos que se nos van presentando. En los últimos tiempos hay unos cambios vertiginosos en las cuestiones esenciales...Hoy la vida va demasiado deprisa, pero no solo me vengo a referir a su ritmo, sino también a los ingredientes que se alojan dentro de ella. Hemos cambiado mas en dos décadas que en un siglo entero. Los avances, la tecnología, las modernas investigaciones han revolucionado nuestras formas de vida. Asistimos inmunes al desgaste de los materiales sólidos con los que se edificaban las ideas, percepciones, creencias y sobre todas estas cosas, los ideales. Y que daban firmeza , plenitud y felicidad a nuestras vidas. Todo arde en el mercado de la cotidianidad y del progreso. Unas cosas queman, prenden y dan fuego; otras se desvanecen y dejan al hombre huérfano de los principales valores. También percibo que últimamente se ha ido produciendo una especie de malversión de las palabras, que han llevado al uso, abuso y falsificación de los conceptos primordiales. Hay toda una manipulación producida de aquí y allá, que desdibuja y trivialaza las naciones. Un ejemplo es el deterioro de las palabras amor y libertad....(¡!!!!!) El bombardeo constante de informaciones a través de los grandes medios es otra de las causas de nuestra confusión. Debemos recurrir a una correcta canalización de éstas. Informaciones, minuciosas, milimétricas, precisas, casi siempre centradas en lo negativo y polémico, que nos dejan fríos y desencantados. Información que no es formativa, que no nos hace mas maduros, ni nos mejora ni nos enriquece. Su efecto va a conducir a lo que yo llamaría exceso de información. Y no solo en este terreno sino que se hace extensivo a los campos profesionales más diversos. Cualquier disciplina académica, la que sea, tiene hoy en día tal riqueza de datos, referencias, investigaciones y reseñas, que uno/a se puede perder en esa selva de notas si no se anda con cuidado. Y que conste que mi crítica no es hacia “estar formado” sino “hacia estar mal informado”.. Ese exceso de referencias se compone de los siguientes síntomas: La persona que se encuentra embriagada de él, sufre de ansiedad, se muestra inquieta, descontrolada. Pero la definición concreta es: Aturdimiento por abundancia y dispersión de reseña y datos. Personalmente me siento sometida a un constante ametrallamiento de datos. Es menester saber hacer una criba de todo eso que nos llega, sobre todo por cuestiones de higiene mental.. Es conveniente descifrar el criptograma de datos que nos llegan como una cascada, unos detrás de otros. Hay que buscar las claves haciendo una labor de síntesis: Quedarse con lo esencial, almacenarlo y tirar lo que estorba. Es un trabajo intelectual y no es fácil, requiere un cierto entrenamiento de separar el trigo de la paja. Repito, desbordamiento por saturación: Ofuscación transitada de perplejidad y confusión. Cierta hipertrofia enfermiza que se atiborra de mil cosas y se desliza hacia cierta indiferencia por saturación de contradicciones. Hay que saber “por donde asomarse” si no se quiere acabar perdido y sin saber a qué atenerse... A ofuscarnos también nos lleva la presentación permanente de vidas conocidas sin mensaje interior: Aquí se lleva la palma la televisión. Da pena asistir al espectáculo permanente de futbolistas, modelos o a las últimas pasadas Belén Esteban. Pocas veces asistimos a una entrevista valiosa, profunda de alguien que nos enseña otra visión de la jugada de la vida, distintas de esas tan manidas y sobadas. Y las revistas del corazón, les dedico una mención especial. Interesa la vida ajena de los personajes conocidos, pero rota, hecha añicos. Hay un fondo tan morboso en esa inclinación.Y luego pasar el rato trivial izando la vida. Las desgracias ajenas gustan, porque compensan las propias. Se trata de pasar el rato sin mas. No, gracias, sin mí... Representan el mínimo denominador común de la cultura de masas. Todo esto luego va conduciendo a una ausencia de líderes en concordancia del pro. Esta ausencia lleva a uniformar a la masa en el peor sentido de la palabra, otorgándole la victoria a una mediocridad que se va imponiendo día a día. El resumen de lo anterior, termina en una desorientación moral. Par mí la moral, es el arte de vivir con dignidad, como corresponde al ser humano. También la moral es el arte de usar de forma correcta la libertad, poniendo en juego los mejores recursos de nuestra naturaleza. La costumbre de poner sobre la mesa lo positivo que uno tiene... Las costumbres hacen y deshacen a los hombres. Lo elevan y lo rebajan de nivel; refuerzan su libertad o la reducen. la moral es la estética de lo mejor. Lo optimo es la meta de una utopía, mientras que lo mejor de nosotros conecta con lo real. Descendemos hacia la “moral light”: Hedonismo _ consumismo_ permisividad y consecuente al relativismo. Es donde asistimos a una sociedad que ha perdido los puntos de referencia. De ahí transitamos hacia una desorientación moral al diluir los criterios personales e ir más hacia los sociales. Erosión demoledora en la que estamos y que oscila entre la levedad y la dispersión, la sugestión por lo inmediato y el éxtasis de la facilidad..el mundo de las satisfacciones inmediatas... El tan sano “carpe diem” que no se debió malinterpretar,la “moral Mayo 68" ha ido produciendo unos efectos imprevistos, y una sociedad desarmada moralmente va a la deriva, al desvanecerse sus fundamentos. Las fronteras entre el bien y el mal ya no tienen un trazado claro, se desdibujan entre los muchos hilos que trenzan el tapiz de lo que deben ser los hombre. Todo esto hace tabla rasa de todo lo que encuentra a su paso.Se produce así la absolutización de lo relativo. Para evitar esta desorientación lo mejor es tener las ideas claras sobre lo que es la vida y por supuesto, sobre uno mismo. ... ¡Y por ello es importante el "Nosce te ipsum."....! Pero la formación no se improvisa: Necesita tiempo y dedicación y que los conceptos se vayan sedimentando. Se necesitan modelos de identidad que enseñen a vivir. Enseñar es seducir por encantamiento; descubrirle a alguien pistas, vertientes, parajes de luz que lleven de forma sugestiva y positiva hacia valores seguros, sin caducidad. Y transitar por ellos. Lo que debe de regresar es el reestablecimiento de la coherencia esforzada que luche titánicamente por no dejarse llevar por la moda del momento. Habría que expulsar de nuestro recinto el cinismo y la doble moral. Como dijo Cervantes: “ Tu mismo te has forjado tu ventura”. Para circular de modo desenvuelto en un mundo tan difícil y complejo yo me aplico la siguiente formula: Busco la ética, la adhesión de la inteligencia y la voluntad al bien, y no hay bien sin amor... non intratur in veritatem, nisi per caritatem.. Sub umbra floreo: C. Bürk